La pandemia exigió adecuar las acciones para dar respuesta temprana. En Jujuy, los rastrillajes se convirtieron en una de las herramientas clave.
“En nuestra provincia, con una tradición establecida en Atención Primaria de la Salud, tenemos como referencia permanente el trabajo de Carlos Alvarado y en la actualidad, llegamos al terreno dando un nuevo valor a ese contacto de primera mano, en especial por las demandas que plantea el Covid-19”, precisó la Subsecretaria de Atención, Prevención y Promoción de la Salud, Fernanda Peynado.
“Con los años, el recorrido casa por casa se fue perdiendo y luego, solo se continuó con el agente sanitario de forma individual, realizando las rondas cada 4 meses para el relevamiento de información sanitaria, la que luego se procesaba con el detalle de cada departamento del territorio jujeño. Con la pandemia tuvimos que replantearnos estrategias y la que se desarrolla hoy en la provincia es esencialmente extramuros: a la fecha, estuvimos 3 a 4 veces en cada vivienda, definiendo el abordaje en función de la situación epidemiológica”, agregó.
En el mismo sentido, explicó que con los rastrillajes se logró la contención de situaciones de brotes de Covid-19 en La Quiaca, Humahuaca, Susques y Alto Comedero en capital, por ejemplo. Además, se observan síntomas con la mirada de los profesionales de la salud, se realiza la indicación de tratamiento, la entrega de medicación, la orden de internación y de traslado para los casos que así lo requieren, siempre con el apoyo de los diferentes ministerios, los municipios, instituciones civiles y el Ejército Argentino.
“El abordaje domiciliario de atención y asistencia que se sostiene desde hace un año, se lleva adelante con agentes sanitarios, enfermeros, médicos, educadores para la salud, técnicos en laboratorio, bioquímicos, equipos de salud mental, SAME 107 y trabajadores sociales en la calle, preguntando a cada vecino, a cada familia por su salud cuando muchos, por la misma pandemia, dejaron de consultar al especialista y de pronto, encontramos situaciones incluso más complejas que el propio virus”, indicó Peynado, detallando que “la coexistencia de enfermedades silenciosas o de factores de riesgo como la diabetes, la obesidad, la hipertensión potencian en muchos casos al Covid-19, generando mayor probabilidad de mortalidad. Hoy, nuestras acciones apuntan a dar respuesta a la actualidad con que nos encontramos en cada domicilio con test de glucemia, tomas de muestra para tuberculosis, test rápidos de VIH, completando Calendario Nacional de Vacunación, gestionando los turnos para la atención en los CAPS, controlando a embarazadas, niños y adultos mayores, y por ello está en marcha también el Plan Provincial de Diabetes, Obesidad e Hipertensión Arterial, con atención integral y gratuita desde la salud pública”.
Por último, destacó que la estrategia en terreno “se ha reforzado con 3000 agentes incorporados al sistema de salud” y sus resultados “con respuesta a tiempo, nos permiten continuar con actividades abiertas y mínimas restricciones, en tanto y en cuanto damos cumplimiento a las medidas de bioseguridad vigentes en todos los ámbitos”.